Panorama seco para el campo
(Jiménez).- El recurso hídrico cada vez más escaso atemoriza y pone en incertidumbre a los agricultores de Jiménez.
Al borde de perderse el próximo ciclo agrícola en el distrito de Jiménez, las presas que riegan los campos agrícolas se encuentran a niveles críticos, y al momento, no cuentan con los 60 millones de metros cúbicos que requieren las 3 mil hectáreas que labraron este año.
Por años, el distrito fue afortunado al no depender del temporal, las reservas acuíferas de las presas pico de águila y San Gabriel, refrescaban y nutrían los diferentes cultivos, que pese brotar en el desierto, se daban como en un oasis de abundancia.
Pero la ausencia de lluvia ha castigado no solo a esta región, sino al resto de la entidad, y los niveles de dichas presas, alarman al conservador, pero ya ponen a pensar al optimista, y hacen que el citadino vuelva la vista al campo.
Para Jiménez, siempre se había tenido un promedio de 350 milímetros de acumulamiento pluvial al año, pero la última vez que se registró esa cantidad de precipitaciones, fue en el año 2016, y de ahí en adelante, ha venido el decremento.
“Para 2017 tuvimos 244 milímetros, en 2018, 128, para 2019, solo 166, y el año pasado apenas nos cayeron 86 milímetros, es algo muy difícil lo que estamos viviendo, si se acaba el campo, se acaba todo”, concluyó Baca Perea.